Acción Serrana

Estrategia multinacional por la restauración y conservación de bosques de Polylepis 

En lo más alto de Sudamérica encontramos bosques del género Polylepis, en una franja de cinco mil kilómetros de extensión que va desde Venezuela, pasando por Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile y llegando a su distribución más austral en las montañas del centro de Argentina.

En las montañas de las Sierras Grandes de Córdoba (centro de Argentina) encontramos bosques montanos dominados por Polylepis australis, localmente conocidos como Tabaquillos. En otros lugares reciben otros nombres como Queuña, Queñua, Queñoa, Yagual, Kewiña o Árbol de Papel.

Lo árboles del género Polylepis forman los bosques a mayor altura del planeta y se pueden encontrar en diferentes porciones de la coordillera de los Andes y montañas asociadas. Su distribución se ha visto drásticamente reducida debido a la tala, quema y pastoreo, en las Sierras Grande de Córdoba se estima que se  ha reducido al 3% de su cobertura original.


La restauración y conservación de estos bosques es de vital importancia para proteger el sistema hídrico de Sudamérica. Sus ramas, con musgos y líquenes, recogen la niebla y la precipitan de las nubes. Sus raíces retienen los suelos, evitando la erosión y manteniendo vertientes permanentes. La presencia de estos bosques evita la expansión de superficie de roca expuesta y genera una cobertura vegetal que favorece la retención de carbono, fundamental para la mitigación del cambio climático. Una gran diversidad de especies endémicas y en peligro de extinción dependen de estos bosques cada vez más fragmentados.

Polylepis con líquenes y musgos. Córdoba, Argentina

Hoy, una convergencia favorable de intereses gubernamentales, científicos y comunitarios brindan una oportunidad sin precedentes para revertir el declive de los bosques de Polylepis. Así nace, en 2018, la Acción Andina, una iniciativa pública/privada para la restauración y conservación de los bosques de Polylepis. La iniciativa está liderada por las ONGs Global Forest Generation  y Asociación Ecosistemas Andinos (ECOAN).
Acción Serrana es un proyecto de Ecosistemas Argentinos que forma parte de Acción Andina desde sus comienzos.


Taller apertura julio de 2018, Cusco, Perú.
Representantes de Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile y Argentina

Voluntades que construyen bosques

En 1997 comenzaron las tareas de alambrado en la primer área de reforestación con Polylepis en Los Gigantes, lo que marcó el comienzo del Proyecto de Conservación y Reforestación de las Sierras Grandes de Córdoba. La iniciativa fue tomada por el biólogo Daniel Renison, quien dirigió el proyecto hasta el año 2007, quedando desde entonces a cargo del biólogo Ricardo Suárez. Tanto sus referentes, como todas las personas que participaron, lo hicieron ad-honorem. Generando así un espacio de participación voluntaria, donde muchas manos sumaron su aporte para ayudar a concretar este sueño.

Voluntariado, año 1998. Quebrada de los Refugios, Los Gigantes.

A través de los Voluntariados, miles de personas tomaran contacto con la problemática que representa la falta de cobertura vegetal, la degradación o pérdida de suelo y el impacto de ello sobre la capacidad de absorción de agua de las Sierras. Dato muy relevante, ya que estas montañas proveen de este recurso al 70% de la población de Córdoba, allí se encuentran las nacientes de los principales ríos de la provincia.

Los voluntariados fueron también una oportunidad para ayudar a revertir esta situación, para aprender, compartir y hacer visible el gran trabajo que significa una reforestación de altura.

Año 2015, mismo lugar de la foto anterior con el bosque en crecimiento.

Así, sumando voluntades se logró el bosque que hoy vemos de pie. Desde entonces, todos los proyectos de reforestación con Polylepis en Córdoba realizan voluntariados, al igual que muchos otros proyectos de restauración ecológica, lo cual aporta mayor conciencia y compromiso social con las causas ambientales.

Voluntariado de recolección de semillas. Los Gigantes, Córdoba.

Los voluntariados son un instrumento muy valioso, ya que la magnitud de estos proyectos nos demuestra que hacen falta muchas manos para lograr los objetivos. Algunas de las actividades que se realizan son: recolección de semillas para la producción de arbolitos para reforestar, plantación, reparación de alambrados, trabajo en cárcavas para frenar la erosión de suelo, mantención de senderos y de cartelería informativa/educativa.